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Repsol valora sus resultados en un primer trimestre marcado por el Covid-19

Repsol valora sus resultados en un primer trimestre marcado por el Covid-19

El negocio Industrial, en el que se integra Repsol Perú, tuvo un crecimiento del 6%

05 mayo 2020

La multinacional española Repsol anunció un resultado neto ajustado para el primer trimestre de 2020 de 447 millones de euros. Este periodo se ha visto marcado por un contexto de excepcional complejidad y la variación respecto al mismo periodo del ejercicio anterior es de un descenso del 27,7%. 

De entre los distintos segmentos de negocio de la compañía el Industrial (Refino, Repsol Perú, Química, Trading y Mayorista y Trading Gas) aumentó su resultado un 6% hasta los 288 millones de euros, frente a los 271 del primer trimestre del año anterior. La compañía destaca que se logró compensar “la negativa influencia del volátil entorno de precios y la reducción de la demanda, que afectaron principalmente al área de Refino”.

Durante este trimestre, en el que se produjo una fuerte caída de los precios del crudo y del gas y una drástica disminución de la demanda provocada por el COVID-19, Repsol mantuvo activas sus instalaciones y desempeñó “un papel de servicio público esencial en la crisis sanitaria global”, señala la compañía en un comunicado.

El modelo de negocio integrado de la compañía, indica la información, junto con su flexibilidad y resiliencia, fueron fundamentales para que sus negocios lograsen un sólido resultado en este escenario tan adverso. El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, puso en valor “la forma en que Repsol se ha adaptado a este escenario y ha empleado todas sus capacidades tecnológicas, industriales y humanas también para luchar contra el coronavirus”.

Repsol ha sido una de las compañías que han tomado parte activa en la lucha contra el coronavirus. Entre otras medidas, dedicó su Centro Tecnológico ubicado en Móstoles a la producción de geles hidroalcohólicos para el Ministerio de Sanidad.

Para el resto del ejercicio, el Consejo de Administración de Repsol decidió adoptar un Plan de Resiliencia que contempla la puesta en marcha de iniciativas que supondrán reducciones añadidas de más de 350 millones de euros en los gastos operativos y de más de 1.000 millones en las inversiones. La compañía cuenta con la flexibilidad de su portafolio de activos y una holgada liquidez financiera para afrontar el nuevo y complejo escenario.